El bloqueo de la administración Trump a Huawei está llegando a un punto donde cada vez parece que es más difícil encontrar una solución cercana. Huawei ha mostrado su voluntad de realizar algunas cesiones en el verdadero punto de conflicto, las redes 5G.
El CEO de la compañía china ya ha dejado claro que podrían vender la información de su tecnología 5G a compañías occidentales, una oferta de paz que de momento no ha obtenido respuesta. Sin embargo Huawei también ha comenzado a buscar alternativas a los servicios de empresas norteamericanas.
Smart TV, Smartwatch y ahora portátiles
Ya sabemos que pronto lanzarán un Smart TV con su sistema Harmony, e incluso el nuevo Huawei Watch GT 2 lo incorporará, habiendo ya algunas capturas de como serán las esferas con el nuevo sistema. Estos dispositivos, si bien ya se han filtrado, no son oficiales, ya que la compañía no los ha lanzado ni presentado. Otra cosa muy distinta es la relativa a sus portátiles, dispositivos que hasta ahora siempre habían llevado sistema Windows, y es que Huawei ha comenzado a vender sus portátiles con Linux como sistema operativo.
Como podemos ver en la web de su tienda en China, Huawei ofrece tres modelos con Linux, concretamente con la versión Deepin desarrollada en china. Estos dispositivos son los Huawei MateBook 14, MateBook X Pro y el MateBook 13.
De momento solo aparecen disponibles en el mercado chino, no habiendo rastro de ellos en otros mercados. No parece que vaya a estar disponible fuera del gigante asiático en un futuro cercano, aunque puede que el evento de lanzamiento de los Huawei Mate 30 nos de mas sorpresas de las esperadas y podamos conocer más información al respecto.
Si bien Huawei se ha pronunciado en varias ocasiones afirmando que su intención es seguir apostando por Android y Windows para sus dispositivos, está claro que poco a poco se va preparando para minimizar esta dependencia. Este es uno de los efectos colaterales que ya mencionaban los expertos. Por mucho que al final las autoridades chinas y norteamericanas lleguen a un acuerdo, ha quedado claro para las empresas chinas que una dependencia de los productos USA les coloca en una situación de fragilidad. La solución a esto es buscar alternativas, ya sea con servicios externos como Linux, o propios, como HarmonyOS.