La nueva propuesta de Microsoft para su exitosa gama de portátiles es el nuevo Surface Go, un dispositivo que hace realidad el deseo de muchos usuarios de contar con un Surface mini, más cómodo de transportar pero sin perder la esencia de la gama. Durante una semana he podido hacer uso de este terminal, ver sus puntos fuertes y flaquezas de primera mano, para poder contaros las impresiones que me ha dejado. Veamos el resultado.
Inconfundiblemente Surface
Comenzaremos por el aspecto del Surface Go, del que basta un vistazo para reconocer en él un autentico Surface pero en versión reducida. Sus dimensiones son 245 mm x 175 mm x 8,30 mm, con un peso de 522 gramos, lo que representa una considerable reducción con respecto a terminales anteriores presentados por Microsoft. Los datos están muy bien, pero se aprecia mejor si lo comparamos con un Surface Pro 4 como en la siguiente imagen.
El diseño en magnesio del Surface Go cuenta en la parte trasera con el habitual Kickstand, el soporte trasero que permite un amplio rango de posiciones al no contar con unas prefijadas, si no que se abre de forma progresiva adaptándose al uso que queramos darle. Debajo de esta se encuentra la bandeja para la tarjeta microSDXC, que se vuelve invisible si lo usamos en modo tablet. Finaliza la trasera el logo de Microsoft en un bajorelieve plateado y en la parte superior una franja más oscura donde se aloja la cámara trasera de 8 MP y un pequeño microfono.
En el lateral izquierdo no tenemos nada, dejándolo completamente limpio salvo la pestaña para desplegar el Kickstand. En el lateral derecho encontramos, en orden de arriba hacia abajo, la toma de auriculares jack 3.5mm, el puerto USB Tipo C, el SurfaceConnet y la pestaña para abrir el KickStand. Si nos vamos a la parte superior del terminal nos encontramos a la izquierda el botón de encendido y a continuación los controles del volumen. En la parte inferior tenemos el área donde se encaja magneticamente el teclado, el cual por cierto no viene incluido y hay que comprarlo aparte.
Para el final hemos dejado el frontal, la parte más importante. El Surface Go ha apostado por su tecnología Pixelsense en un display de 10 Pulgadas con resolución 1800 x 1200 pixeles que nos dan 217 ppp. De protegerlo contra rallados y roturas se encarga un cristal Corning Gorilla Glass 3. Bordeando la pantalla nos encontramos con un marco donde se sitúa la cámara de 5MP, reconocimiento facial de Windows Hello y un microfono. En los laterales de este marco situados en la parte superior encontramos dos hendiduras correspondientes a los dos altavoces.
Un diseño excelente, pero con un marco excesivo
Sin duda el diseño casi no tiene peros, casi, porque sigo sin entender que se mantengan unos marcos que se ven desmesurados en un terminal de este tamaño. Cierto que afirman que es para poder sujetar el dispositivo sin que interactuemos con la pantalla, vale lo compro, pero ¿tienen que ser tan anchos? en mi caso me sobra la mitad y soy de dedos tipo bratwurst. Esto es algo que rompe la apariencia casi perfecta del Surface Go y que no me ha gustado demasiado.
Intel Pentium Gold 4415Y y dos modelos para elegir
En las tripas del Surface Go encontramos unas especificaciones que están pensadas para un uso medio, pero no para grandes cargas. El procesador elegido ha sido un Intel Pentium Gold 4415Y a 1.61 GHz de séptima generación con una gráfica Intel HD 615, el motivo es su bajo consumo de recursos, lo que a su vez genera un menor calentamiento y hace innecesario el contar con un sistema de refrigeración activa. Hay que tener en cuenta que Surface ha puesto a disposición de los usuarios españoles dos modelos de este dispositivo, con 4 GB de RAM y 64 GB de almacenamiento y un precio de 449€, o con 8 GB de RAM y 128 GB de almacenamiento que se va a los 599€. En nuestro caso hemos contado con el modelo superior.
Hay que aclarar que el Surface Go viene con Windows 10 Modo S, por lo que de inicio solo se pueden instalar aplicaciones y juegos desde la tienda Windows 10, a menos que pasemos a una versión Home o Pro. Aunque hablare de ello más adelante, solo decir que cuando le han puesto modo S es por algo.
Dimensiones: 245 mm x 175 mm x 8,30 mm
Peso: 522 gramos sin teclado
Colores disponibles: Magnesio
Resolución: 1800 x 1200 (217 PPP)
Relación de aspecto: 3:2
Relación de contraste: 1500:1
Táctil: multi-touch de 10 puntos
Cristal Gorilla Glass 3 de Corning
Intel HD Graphics 615
Ampliables vía tarjeta microSD de hasta microSD de hasta 1 TB
/ Bluetooth 4.1 / Más adelante llegará un modelo con soporte LTE
Conexión para auriculares de 3,5 mm
1 puerto Surface Connect
Puerto para Funda con teclado para Surface
Lector de tarjetas microSDXC
Compatible con Surface Dial
Altavoces estéreo de 2 W con audio Dolby Audio Premium
TPM 2.0
Cámaras mejor de lo esperado y con Windows Hello
Cuando hablamos de este tipo de dispositivos no esperas mucho de sus cámaras. Normalmente están ahí para cumplir, permitir hacer una video llamada y poco más. El Surface Go cuenta con una cámara frontal de 5 MP, mientras que en la parte posterior cuenta con una cámara de 8MP autofocus en ambos casos se nos permite grabación en video HD 1080 p hasta 30 fps. Además para realizar fotografías contamos con la opción de hacer uso de HDR, lo que puede ayudarnos a conseguir tomas realmente logradas. No podemos decir que sea una maravilla, pero si que da mejores resultados de lo que esperábamos en un terminal de esta gama, posiblemente a la altura de sus hermanos mayores (y más caros).
Por otro lado contamos con la función de desbloqueo facial mediante Windows Hello, el cual cumple con las expectativas y funciona realmente bien, bajando un poco el rendimiento en exterior o si estamos ladeados y no justo en frente del terminal. Es recomendable usar la opción de «Mejorar el reconocimiento» para mejorar los resultados.
Windows 10 in S Mode
Tengamos en cuenta que el Surface Go está pensado para un público que busque un dispositivo para tareas de uso cotidiano, no está pensado para manejar procesos muy pesados o exigentes, aun pudiendo ejecutarlos. Para evitar que sobrecarguemos el terminal instalando programas que puedan afectar a su rendimiento, Microsoft ha optado por lanzarlo con Windows 10 en Modo S. Con ello solo podemos instalar aplicaciones desde la tienda Windows 10 que han pasado el filtro de la empresa. En este contexto he podido hacer uso del terminal de una forma correcta, sin tirones ni lentitudes en un uso normal. Cuando hablo normal me refiero al uso que le usuario medio hace de este tipo de dispositivos, a saber aplicaciones Office, navegar por internet, aplicaciones como Netflix, Twitter, etc. Cuando he tratado de disfrutar de juegos medianamente exigentes como Sea Of Thieves, los resultados no han sido los mejores y es que se nota que no esta pensado para ese uso.
Si queremos podemos pasar de forma gratuita y con solo un par de pasos a Windows 10 Home, e incluso a Windows 10 Pro mediante la compra de una licencia. Para ello solo debemos ir a Configuración, Actualización y Seguridad, Activación y alli tenemos la opción de Cambiar a Windows 10 Home.
Usa el cargador del móvil para tu Surface Go
Uno de los aspectos que me molestan de mi Surface Pro 4 es que si voy a asistir a un evento o a un reunión que puede prolongarse, es mejor que me lleve el cargador a cuestas y tratar de estar cerca de un enchufe por si acaso. Con el Surface Go Microsoft ha mejorado de forma notable esto ya que si bien usa un Surface Connect como cargador, también podemos cargar el dispositivo usando el puesto USB tipo C. Es decir podemos usar el cargador de un móvil e incluso cargarlo mediante una batería externa, lo que hace que la palabra movilidad tenga un mayor significado en este terminal.
Por otro lado decir que Microsoft habla de una duración de hasta 9 horas, en mi caso no solo no he llegado a ello si no que he quedado lejos. Apurando el dispositivo puedes alcanzar 6 horas, tal vez un poco más si ya juegas con el brillo, etc. pero desde luego no he alcanzado las cifras dadas haciendo un uso normal. Esto da aún mas razón al poder hacer uso del puerto USB para la carga.
Experiencia de uso con Surface Go
Aunque no ha sido mucho el tiempo que he podido trastearlo, si me he podido hacer una idea general de su uso. La mayoría del tiempo he usado el Surface Go con Windows 10 modo S, ya que doy por supuesto que es la forma de conseguir la mejor experiencia y para lo que lo ha diseñado Microsoft. Durante ese tiempo he podido comprobar que el dispositivo responde de forma muy correcta, eso sí con algún retardo puntual al ejecutar algunas acciones si se tienen varios procesos ejecutándose.
En general el rendimiento es aceptable, pero sin llegar a los niveles que nos tienen acostumbrados con las versiones superiores de la gama Surface. Eso si cuando le pedimos un esfuerzo es donde se nota esta diferencia, olvidate de usarlo en plan gamer. Los juegos medianamente exigentes dejan claro que no están hechos para el Surface Go y debes conformarte con que puedas hacerlos funcionar, sin esperar disfrutar de la mejor experiencia.
Si ya pasamos a Windows 10 Home y queremos instalar programas más completos, como el popular Photoshop, notamos que todo funciona correctamente, pero se hace de forma lenta y a veces se nota que le cuesta hacer algunos procesos.
Lo que es una gozada es su pantalla, muy en la linea de la gama Surface y que te deja ver una película o video de forma mas que satisfactoria, aunque su relación de aspecto 3:2 hace que suelas ver las correspondientes bandas negras. Sin embargo la calidad de colores, contraste y brillo le sitúan como una de las mejores en su rango.
Accesorios, saca la billetera
El Surface Go viene pelado, nada de teclado o Pen. Ambos se venden por separado y si no puedes pasar sin ellos, debes sumarlo al coste del dispositivo. En este caso he contado con un Surface Go Type Cover, que sale por 99.99€, pero no con el Surface Go Pen que cuesta unos 99€. Si dispones de un Pen de anteriores versiones podrás usarlo, pero no lograrás las prestaciones que te la detección de inclinación y 4096 niveles de sensibilidad el nuevo modelo.
El Surface Go Type Cover del que hemos podido disponer en esta toma de contacto, es muy similar a lo que vemos en otros modelos, aunque con un menor tamaño y por ejemplo la falta del botón del menú desplegable. Por otro lado el touchpad es solo un poco más pequeño en comparación con el de mi Surface Pro 4.
Comenzado con que es retroiluminado y guarda los patrones de calidad de anteriores modelos, el nuevo Type Cover es un complemento que sin duda agradecemos en el uso del Surface Go. El agarre magnético funciona a la perfección y se mantiene unido de forma firme, ademas cuenta con un pliegue que se pega a la parte inferior de la pantalla, proporcionando una inclinación al teclado que agiliza la escritura.
Lo cierto es que sin el teclado, no es lo mismo usar el dispositivo de Microsoft. Cualquier acción que requiera escribir te quita un buen pedazo de pantalla con su teclado táctil, por lo que agradeces un teclado. Cierto es que puedes usar el Pen para escribir y realizar otras funciones, pero teniendo en cuenta que cuesta casi lo mismo, está claro cual es el primero en la lista de deseos a pesar de su coste de 99.99€. Además si quieres un acabado de más calidad también cuentas con versiones Alcantara, pero entonces el precio se va a los 129.99€.
Conclusiones
El Surface Go tiene el foco puesto claramente en el público estudiantil. Su fecha de lanzamiento, el contar con Windows 10 modo S y su precio son un claro indicador de ello. Sin embargo se enfrenta a una dura competencia en este mercado, y para competir Microsoft ha querido apostar por tratar de ajustarse lo más posible a lo que conocemos como un dispositivo Surface.
Si coges un Surface Go lo primero que notas es que la calidad de acabados y de diseño es genuinamente Surface, te sientes como con una versión mini de un Surface Pro pero más manejable. Su pantalla hace que sea una tablet destacable pero, gracias a Windows 10, con funciones de portátil. Mientras nos mantenemos en Windows 10 modo S y le damos uso «habitual», su respuesta es muy satisfactoria. Sin embargo si queremos salirnos de su rango de confort, pedirle un uso mas exigente, o pasando a Windows 10 Home con programas que están pensados para su uso con hardware más potentes, en este aspecto la experiencia comienza a padecer.
Teniendo en cuenta que probamos el modelo más potente y caro, no sabemos como será la experiencia en el modelo de 4 GB de RAM. Sin embargo nos ha quedado claro que Windows 10 S es lo más adecuado para este dispositivo. Es mejor recurrir a las aplicaciones de la tienda cuyos requisitos se ajusten al dispositivo y no pedirle que mueva programas más exigentes. Lo bueno es que si en un momento determinado nos vemos obligados a usarlos, podremos hacerlo, algo que no muchos más pueden decir, aunque siendo conscientes de que le estamos exigiendo un considerable esfuerzo y eso se refleja en el rendimiento.
Sin duda un aspecto que me ha gustado mucho es poder cargar el terminal con el mismo cable que uso para el móvil. Esto hace que solo necesite llevar un cable encima y ademas puedo conectarlo al cargador del coche o a una batería. Le da un plus de movilidad que echo en falta en mi Surface Pro 4. Por otro lado los marcos me chirrian, una pantalla excelente que no impide que no haga más que fijarme en ese recuadro negro que lo bordea.
El precio es una de las bazas que juega Microsoft, pero si a ello le añadimos el teclado se encuentra con un serio competidor en su propia casa. Las ofertas que Microsoft hace con modelos como la Surface Pro, hace que ya no haya tanta diferencia de precio. Un ejemplo: ahora mismo el Surface Go en oferta de Pack con teclado y Office 365 te sale en el modelo de 8GB/128GB por 728€ €. Si te vas a las ofertas de Surface Pro Intel Core i5 8GB/128GB con teclado Signature te sale en 859€.
En resumen estamos ante un dispositivo para quienes quieran hacer uso de Windows 10, contar con la calidad Surface y no quiere gastarse lo que cuesta una versión más potente. La movilidad y diseño son una baza importante, ya que contamos con un terminal premium que podemos llevar comodamente e incluso cargar con el cable del móvil. Si no salimos de su zona de confort nos aseguramos una buena experiencia, pero conociendo sus limitaciones. Solo queda por ver si se ajusta a tus necesidades o prefieres hacer un esfuerzo e ir a por un modelo superior.